Clic era nuestro perro, tenía 2 años.
LLegamos por fin, entonces, mi hermano Jim (Jim y Kim son mellizos, ambos tienen 16 años...) dijo:
Creo que deberíamos llevar a Clic al veterinario.
Antes de que pudieramos bajar del coche, mi padre arrancó y dijo: "¡Abrochaos el cienturón!", y arrancó a toda prisa. Lo que no sabíamos era que la policia nos estaba persiguiendo. Aterrada, mi hermana Steve empezó a llorar.
-No pasa nada- intenté calmarla.
¿Por qué la policia nos persigue?- me preguntó mi hermana aun llorando.
-Seguro que no es nada, y que se han equivocado de coche...- la dije sollozando.
Mi padre paró el coche y aparcó en un extremo de la carretera.
-Si, agente, ¿algún problema?- preguntó mi padre.
-No. Solo me quería presentar. Me han dicho que sois nuevos en el pueblo... por cierto, soy el agente Martin, pero me podeis llamar Tin...- dijo éste.
-Bueno... agente Martin... digo Tin... si, somos nuevos en el pueblo, y bueno, te presento a mi mujer Rose y a mis hijos, Steve, Fanny, Kim, Jim y al más pequeño, Jacob- dijo mi padre señalándonos mientras decía nuestros nombres.
-Encantado, vais a vivir en la casa antigua que hay en la calle Estelar Platón, ¿no?- preguntó Tin.
-Si, vamos a vivir ahí... bueno, este verano... ¿y por qué lo preguntas?
-Ah, porque hay mucha gente que dice que está encantada, pero son solo leyendas... Bueno... ¿¡Dónde ibas tan rápido!?
-Íbamos a llevar a Clic, nuestro perro, al veterinario...
-Entonces, por esta vez te la paso..., te voy a indicar donde hay una clínica veterinaria...
Tin nos enseñó un viejo mapa y nos marcó la ruta. Mi padre le dio las gracias, y seguimos el mapa. LLegamos a la clínica veterinaria, allí esperamos hasta que nos atendieron.
-Señor Matt Pimson.- llamó una mujer alta y rubia.
-Si, soy yo- contestó mi padre.
-Entre con Clic- dijo ella.
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